El equipo de Valverde suma dos puntos en dos partidos consecutivos en casa que le hacen correr el riesgo de descolgarse en la pelea con el Atlético por la Liga de Campeones
El Athletic es la mirada de mi aitite. El Athletic es Ernesto Valverde en el césped de La Cartuja encarnando el triunfo de una manera de hacer, la suya, que es también la del club que ama y ha vuelto a hacer campeón, un buen campeón
Los altercados sucedieron instantes después de la llegada de los equipos al estadio, cuando algunos aficionados radicales aprovecharon la inercia del recibimiento
El partido y el ambiente en Bilbao regresan al fútbol la esencia de un deporte que en el presente está lleno de polémica, en un lugar donde siempre hubo emoción
Últimamente me pregunto mucho por el sentido del fútbol en lo relativo a los pequeños. Es como si la mera presencia de J. diera sentido a todo, como si nuestro club en su conjunto tuviera su razón de ser en dar a ese niño un lugar en el que pasar las tardes y sentir el cariño de la gente
Cada vez que voy a un partido en el estadio tengo la sensación de que hay dos partidos que se juegan a la vez y en paralelo, uno en el campo y otro en una sala oscura, llena de pantallas
Contra lo que se dice, el fútbol sí tiene memoria. Por eso siguen tan presentes la devoción por el portero vasco y por el viejo y querido club bilbaíno
Carlos Purroy jugó más de un centenar de partidos en LaLiga Santander en los ochenta mientras estudiaba Artes Aplicadas. Algo nada común. Se enfrentó a históricos como el argentino Diego Armando Maradona. Su entrenador en el Athletic Club le decía que nunca había conocido a un “futbolista artista”. Una de sus obras más gigantescas es un homenaje a la afición de su ciudad natal, Pamplona